Hace un tiempo vi que Cris del blog Mi Medio Limón que en su blog organizaba pequeños debates sobre temas relacionados con los libros, y en cuanto vi los temas lo tuve claro, tenía que participar. Así que aquí está mi colaboración.
El tema en esta ocasión ha sido Si un libro no os gusta, ¿lo leéis hasta el final?
Podría deciros que sí, soy de las que cuando coge un libro se empeñan en acabarlo, que cómo voy a dejar una historia sin conocer el final. Pero estaría mintiendo descaradamente.
Cuando era más joven lo único que conocía en el tema libros eran los que me obligaban a leer en el colegio, y desgraciadamente en mi colegio tenían una relación demasiado íntima con los clásicos. No os podéis hacer una idea de lo que odiaba leer, sí, aquí donde ahora me veis, la que lee de media unos 12 libros mensuales, cuando era más joven odiaba profundamente leer, tanto que era ver un libro y sufría urticaria. Afortunadamente con el paso de los años descubrí que hay muchos libros más allá de esos que me obligaban a leer en el colegio y finalmente encontré mi amor por la lectura.
Seguramente os preguntareis porqué demonios os he contado esa historia, pues viene a raíz de que tengo por norma JAMÁS obligarme a leer un libro que deteste, porque para mí sería volver a esa época y no quiero. Amo leer, lo hago para disfrutar, pasar un buen rato, descubrir historias fascinantes... ¿por qué voy a leer un libro que no quiero, que no disfruto y en el que todo el rato estoy viendo cuantas páginas me quedan para acabarlo? Nadie me obliga a hacerlo, lo hago porque quiero. Si no me gusta esa lectura no pasa nada, seguro que hay cientos de personas que sí lo hacen, hay que cerrar el libro e irse a otro, hay millones de historias más por conocer.
Entonces... ¿eso quiere decir que nunca he terminado un libro que no me haya gustado en algún momento? No. He leído muchísimos libros que me han resultado malos en algún momento. Pero con lo que decía antes no quería dar a entender que si un libro veo que es malo ya lo abandono. Normalmente abandono los que no consigo avanzar -llevo 3 o 4 días seguidos y no hay manera de pasar del segundo capítulo-, no me estoy enterando de nada de lo que pasa porque me resulta muy complicado de entender, no me atrapa absolutamente nada y me distraigo hasta con el propio silencio... No sé si estos ejemplos han ayudado un poco mejor a entender lo que quiero decir.
Aunque también tengo que reconocer que he hecho excepciones. En alguna que otra ocasión es verdad que me he "obligado" a terminar algún libro, incluso he utilizado la técnica de intercalarlo con otras lecturas, pero esas veces han sido porque odiaba la historia pero había una única cosa que quería saber cómo se resolvía; o también está la parte de que es el último libro de una saga larguísima, por dios después de tantos años leyéndola por narices hay que leerse el último libro.
Como habéis podido ver yo estoy totalmente en contra de forzarse a leer un libro cuando en realidad no quieres hacerlo, no te llama, no es tu estilo... Leemos porque nos gusta, queremos descubrir nuevas historias que nos apasionen, buscar un refugio, fantasear con nuevos mundos... ¿por qué obligarnos y convertir eso que hacemos por placer en algo triste y tedioso? Sigamos leyendo, si hay un libro que no nos gusta no pasa nada, hay millones de historias más ahí fuera que hay que descubrir. Aunque hay ocasiones en las que vale la pena hacer alguna excepción.
Yo suelo intentar leerlos hasta el final, por si mejoran, pero es verdad que cuando no me gustan nada de nada, los abandono, tengo demasiados libros pendientes para perder tiempo por uno que no me gusta.
ResponderEliminarBesos