A Merced de la ira
Título Original: Trace of Fever
Saga: Men Who Walk the Edge of
Honor#2
Autor/a: Lori Foster
Editorial: Harlequin Ibérica
Año de Edición: 2013
ISBN: 9788468705545
Nº de páginas: 384
Edición: Tapa Blanda
Precio: 17.38€
Idioma: Español
Género: Romántica Adulta
Este
libro puede ser inadecuado para menores de 18 años debido a su contenido
sexual, violencia y/o adicciones. Si decides leerlo es bajo tu responsabilidad.
Al mercenario Trace Rivers le encanta el
subidón de adrenalina de una misión bien planeada. Primero, se ganará la confianza
del ejecutivo corrupto Murray Coburn, luego reunirá las pruebas que necesita
para frustrar la operación de contrabando del tipo. Es un plan perfecto hasta
que la hija de Coburn, perdía hacía tiempo, regresa con la venganza en mente.
Con la sonrisa de un ángel y el fuego
ardiendo en sus ojos, Priscilla Patterson no es quien parece ser. Pero tampoco
lo es el guapo guardaespaldas que la pone como una moto. Uniendo fuerzas para
tramar la caída de Coburn, Priss y Trace debe luchar contra la innegable
atracción que hay entre ellos. Pues un solo paso en falso, un solo abrazo
demasiado prolongado, los expondrá a la ira de un despiadado oponente…
Mi Opinion
Tenemos a Trace que
recordaremos que aparecía brevemente en el libro anterior «Emociones
Secuestradas» ya que habían secuestrado a su hermana. Pues ahora es su turno.
Debido al secuestro de su hermana,
Trace está dispuesto a acabar con esa organización de secuestros de
trata de blancas, así que se infiltra en una de las más grandes para
derrumbarla al completo, el ejecutivo corrupto Murray Coburn. Después de meses y meses trabajando duramente está a punto de llevar
su cabo su plan genial pero todo parece ir al traste cuando aparece una chica,
Priscilla que jura y perjura que es la hija de Murray.
Priscilla tiene un plan,
matar a Murray ¿por qué? Porque destrozó a su madre, y por ello su
vida ha sido un infierno. Murray violó a su madre y posteriormente
la pasó por todos sus hombres para que la violaran también. Ese día quedó
embarazada de Priss y obsesionada de que un día Murray vendría a por su hija y a
hacerle daño de nuevo. Así que vivió
escondiéndose siempre, mirando mil veces a todos lados antes de hacer cualquier
movimiento, cientos de prohibiciones a Priss… Ahora con la muerte de su madre
quiere venganza.
La relación que tienen ellos
me gustó en un principio porque comienzan con odiarse,
a ver, Trace lleva meses infiltrado, ha dejado toda su vida de lado para acabar
con Murray y ahora aparece una chica de la nada que va a echar todo su plan a
la mierda, es normal el odio que siente Trace, y a ver Trace solo está dándole órdenes
a Priss sin darle ninguna explicación de porqué lo hace, así que es normal que
también lo odie. Pero aunque se tiren los trastos (hablando de muebles sobre
la cabeza) sienten un deseo que no pueden seguir ignorando por más tiempo, así que
terminan acostándose y luego necesitan más de eso. Además de que mientras pasa
el tiempo comienza la confianza entre ellos y eso
influye y terminan enamorándose.
Estuve en tensión durante
todo el libro porque a ver, el plan de ambos es acabar con Murray así que
tenemos que descubrir que plan es el que finalmente se lleva a cabo, además como toooodos sabemos, aunque tengas en
mente un súper mega ultra genial plan, nunca, repito, nunca saldrá como has planeado,
siempre habrá algo que salga mal y mandará todo al traste. Así que hay que
leer el libro para saber finalmente como destruyen al jefe de la mafia.
Una cosa que no me gustó y no
me di cuenta hasta que finalmente terminé el libro. Es que todo pasa muy
rápido. A ver el libro está súper bien estructurado y se toma su tiempo en
narrarlo todo adecuadamente. Pero cuando terminas el libro te quedas pensando…
¿qué coño todo esto ha pasado en menos de una semana? Really??
Reconozco ésta historia me he
encantado de principio a fin, me ha sacado un par de veces Priss de mis
casillas, pero nada que no pueda superar. Pero reconozco que aunque me ha
encantado me quedo sin duda con el primer libro, todavía sigue siendo mi
preferido, a ver en qué puesto queda el tercero.