Propiedad Privada
Título: Propiedad Privada
Título Original: Reaper’s Property
Saga: Reapers MC #1
Autor/a: Joanna Wylde
Género: Romántica Adulta
Idiomas:
Lo único que necesita Marie es una complicación
como Horse, acaba de dejar al gilipollas de su ex marido, un maltratador, y no
está para pensar en hombres… Pero este motero enorme, tatuado e irresistible
que aparece una tarde en la caravana de su hermano se lo pone muy difícil.
Horse es miembro del Reapers Moto Club, un hombre
acostumbrado a conseguir lo que quiere. Y quiere a Marie, en su moto y en su
cama. Ya.
Marie no está dispuesta a convertirse en la
«propiedad» de nadie. Sin embargo, cuando su hermano roba al club se verá
forzada a ofrecerse como garantía para salvarle la vida.
Este
libro puede ser inadecuado para menores de 18 años debido a su contenido
sexual, violencia y/o adicciones. Si decides leerlo es bajo tu responsabilidad
Admito
que tengo una debilidad por estos libros, ¿por qué? Simple, porque son chicos
que no son simples lo que provoca una gran historia con muchos altibajos, lo
que provoca que te impida apartarte del libro.
Comenzamos la historia con una Marie que ha tenido que dejar a su esposo porque era
un estúpido y abusivo, como no tiene otro lugar donde vivir con su hermano
Jeff, pero no termina la cosa así, porque Jeff no es el típico hermano
protector que ve a su hermanita como una dulce princesa y tiene que evitar que
cualquiera de sus amigos se meta en sus bragas, sino que es uno de esos hermanos drogadictos y alcohólicos que
cuando no están en modo inconsciente trabajan para un club de moteros, Las
Parcas.
Uno
de esos días en los que los moteros aparecen en su casa buscando a su hermano
será el día en el que Marie y Horse se conocerán. Las chispas surgirán entre ellos casi automáticamente y es obvio
que no solo son chispas, sino que es algo más.
Horse
la quiere para él así que le propone que
se convierta en su mujer, pero debido a que Marie no le gusta la forma de
vida del club tiene que rechazar la
propuesta aunque a ella le gustaría quedarse con Horse.
Gracias
al simpático de Jeff que ha estado robando dinero al club Horse toma una
decisión, le propone a Marie que si se
convierte en su mujer no matarán a su hermano.
―No voy a acostarme contigo ―dijo por fin, en
tono sombrío ―. Voy a follarte. Acostarse, acariciarse y todas esas mierdas son
para las parejas, para los que tienen una chica, una novia. Tú ya has dejado
claro que todo eso te importa menos que una meada, así que dejemos las cosas
claras. Estoy amenazando a tu hermano porque robó dinero del club. Aunque tú no
tengas nada que ver, si robas al club, pagas con sangre. Tú eres de su sangre,
así que, si te llevamos con nosotros, él paga. Lo de follarte es solo un bonus.
El
libro, la verdad, me ha parecido
sexista, se podría decir incluso hasta machista. Los hombres son los
componentes del club, los que toman las decisiones, luchan… las mujeres se les
ve más como simples parejas de los hombres. Y si naces en el club como chica,
tampoco tienes poderes como los hombres aunque tu padre sea el líder, solo se
espera de ti que hagas feliz a tu hombre.
Algo que si me
ha gustado es la unidad familiar que desprende el club.
Todos son como una familia que se quiere, se cuida, se protege… están para lo
bueno y para lo malo cuando ni siquiera les unen lazos de sangre. Otra cosa que
me llamó la atención y me gusta pero a la vez me disgusta es que a las mujeres
se les trate literalmente como propiedad, me gusta porque esa clasificación
obliga que una vez un componente del club acepta a una chica como su mujer, de
su propiedad, todos deberán respetarla, protegerla y cuidarla, incluso cuando
él ya no se encuentre. Pero como he dicho aquí hay algo que no me gusta como es
el hecho de tener que ponerse un cartel que diga «Propiedad de…» ¿es que son
objetos o qué pasa?
En
general el libro me ha gustado, sí, es machista, pero la historia engancha porque quieres saber cómo va a continuar, cómo
va a transcurrir todo, si todo terminará bien o tendremos alguna baja por el
camino.
Además
qué coño, lo confieso, aunque me parecía un poco neandertal en plan tengo que
tenerlo todo de ti, tienes que ser mía, tengo que estar dentro de ti… había momentos en los que de verdad me
derretía porque era muy dulce. Creo que la actitud de Horse cambiaría
drásticamente si le estuvieses apuntando con una pistola en la cabeza cada vez
que dijera algo tan neandertal, a ver si tiene cojones de decirlo.