lunes, 3 de diciembre de 2018

Mi experiencia en el NaNoWriMo 2018



Como muchos sabréis durante el mes de Noviembre estuve participando en el reto NaNoWriMo, el reto que consiste en escribir 50k palabras en 30 días. Un reto que os puedo asegurar que no es nada fácil.
No es la primera vez que participo, este es el tercer año, así que sabía muy bien en el lío en el que me metía, pero todos los años que lo he hecho siempre ha habido algo que justamente coincidía con ese mes. El año pasado estaba mucho más relajada, tenía mucho más tiempo para escribir, así que pude llegar a superar esas 50k palabras. Este ha sido todo lo contrario. He comenzado a trabajar y justamente este ha sido el mes que más trabajo ha habido y se ha notado porque llegaba bastante tarde a casa.
El año pasado escribí como fue mi experiencia durante el reto y este año he querido repetirlo contando una perspectiva totalmente diferente. El año pasado conseguí escribir 50k palabras y este año me he quedado en 34.749 palabras.

Parecía que organizaba una guerra con tanto plan de ataque
Durante todo el mes he intentado montar infinidad de planes para poder sacar algo de tiempo. Enserio, creo que toda mi creatividad se iba en organizarlos. Y cuando lo pienso detenidamente parecía sacado de una serie mala, porque enserio, todo lo que podía salir mal, ha salido mal.
Comencé pensando en pegarme atracones de escribir los fines de semana porque viendo que iba a regresar tarde en semana iba a ser muy complicado llegar a las 1.666 palabras esos días, así que iba a ser un poco para contrarrestar. El plan era bueno, pero con lo que yo no contaba es que si no tienes tiempo para hacer nada en semana todo se termina acumulando para el finde, eso significa limpiar, hacer recados, viajes obligatorios... Sí, todo se quedaba para esos días, y a veces costaba escribir algo.
Para rematar el colmo de la organización me pasé una semana entera planificando, organizándome súper bien para tener el fin de semana libre para que solo tuviera que escribir. Y lo conseguí pero se fastidio cuando ese mismo sábado por la mañana me entablillaron un dedo de la mano derecha.
Otro plan descabellado que se me ocurrió fue levantarme por la mañana un rato antes y ponerme a escribir desde mi tablet. Total desastre porque inexplicablemente me decía que el Editor de textos del Drive no era compatible con mi dispositivo. Ya que no podía escribir en la tablet pensé en quizás lo podía hacer en papel y luego transcribirlo, pero eso fue tachado antes de llevarlo a cabo, si no tenía tiempo para escribir ¿cómo iba a tener tiempo para transcribirlo? además yo escribo mucho más lento en papel. He tenido el plan, como hice en ocasiones el año pasado, de escribir antes de dormir, soy más productiva, ¿el problema? Si utilizaba esa media hora antes de dormir para escribir ¿Cuándo leo? Porque ese era el único momento que utilizaba para hacerlo.
Lo que os decía, parecía sacado de una serie mala.

Que disfrutes con la historia hace que no vivas obsesionado por los números
Tengo que reconocer que este año sí que he sentido obsesión por los números, y tenía razón cuando dije el año pasado "Si vives obsesionado por los números te puedo asegurar desde este mismo momento que no va a salir nada bueno de ahí". Lo he podido comprobar en mi propia piel.
No creo que el problema principal haya sido que no dejaba de mirar el contador, creo que ha sido más bien la historia.
Cuando comencé el reto tenía muy claro la historia que quería contar, la llevaba pensando en mi cabeza durante años, tenía todo pensado, todo tan calculado... que creo que ese fue el gran problema. Los primeros días llegaron y no sentía emoción, sentía que actuaba de forma muy mecánica. Escribía una escena y miraba el contador a ver cuantas palabras llevaba ya. Cambié de historia pensando que así mejoraría y algo sí que cambió, con esta que no tenía tan pensada sí que me inspiraba a escribir, a saber cómo iba a continuar la historia, pero tenia otro gran problema. La protagonista. No se cuantas vueltas le he podido dar a ese personaje para hacerle una reconfiguración, pero es que por más que pensara el personaje tenía que ser de esa manera, y lo siento, pero a mí me deprimía. Me ponía delante del teclado llena de energía y con ganas de ponerme a escribir, no pasaban 10 minutos y ya estaba en plan la vida es un asco y no lo podía evitar miraba el contador, miraba la hora, miraba cualquier cosa.
Creo que es muy importante para este reto tener la historia perfecta, la que os apasiona, la que os morís de ganas de contar, de desentrañar, de crear. Porque eso os dará fuerza para querer escribir día tras día, es como cuando lees un libro bueno, no puedes dejar de pensar en él, se te ocurren miles de teorías y estás deseando poder ponerte de nuevo con ella. Y como nota personal para mi yo del futuro, por favor, no escojas para este reto protagonistas con esa personalidad, no ayuda.


Las excusas son para débiles, pero cuando no se puede, no se puede
Confieso que he puesto muchas excusas para ponerme a escribir, y sé que está mal, por eso lo quiero decir.
Había días en los que llegaba a las 8 de la noche totalmente destrozada, y si solo fuera llegar y ya, pues quizás sí que me hubiese puesto, pero pensaba en la cantidad de cosas que tenía que hacer cuando llegara y es que decía no, lo siento no puedo, mi cabeza en algún momento tiene que descansar, lo necesita, sino me va a dar algo. Así que me obligué a poner como norma ver dos episodios de alguna serie diariamente, eso era 80 minutos de desconexión, en los que no tenía que pensar nada. Y una parte de mí se sentía mal porque sabía que debía estar haciendo otra cosa, pero otra no, porque decía es que mi cuerpo lo necesita, no puedo estar 18 horas los 30 días del mes sin parar ni un segundo.

Conociéndome como escritora, porque habrá gente que nace con el don pero otros tendrán que trabajar
Me sigo conociendo como escritora otro año más y sigo admitiendo que soy terrible. Creo que tengo muy buenas ideas, tramas que pueden ser geniales para una historia, pero cojeo en desarrollarlas, y ya ni hablemos de narrarlas, doy verdadera pena. Hay capítulos que los he releído y me he llevado las manos a la cabeza porque parecen escritos por un robot, en plan se levanta de la cama, se viste, se peina. Horrible.
He seguido descubriendo cuales son mis puntos débiles y cuáles son los fuertes. Al igual que me ocurría el año pasado, tengo un problema con las narraciones en tercera persona, no se me dan nada bien. Tampoco las partes de las descripciones, es más, creo que no he llegado a describir en ningún momento a mi personaje. Y sí, vuelvo a tener personajes demasiado tormentosos. No me preguntéis como pero en cierto momento del libro se murió uno y lo peor es que en mi escaleta tenía planeado que esa persona resolviera una cosa.

Aunque estés solo en casa te sientes muy arropado por una comunidad
Me ha encantado no sentirme sola a lo largo de este proceso. Me metía día tras día en Twitter y veía lo que la gente iba lo que la gente iba comentando sobre sus historias. Había algunos momentos bastante divertidos, como cuando alguien asesinaba a algún personaje y le entraba la risa malévola, pero no los mataba porque quisieran. Admitámoslo, nunca queremos matar a nadie, pero la mayoría de las veces lo disfrutamos. Desearle todo el mal a las personas que no dejaban de presumir que iban 10k palabras por delante de ti.
Todas esas personas daban sentido a lo que hacía, no me sentía sola, me sentía dentro de un gran grupo de personas que estaba pasando por lo mismo que yo, y eso se sentía muy bien, me sentía arropada.

Aunque este año no ha sido tan bueno y estaba deseando que se acabara por mi salud mental me ha encantado participar, con sus pros y sus contras.
Porque es un mes en el que me centro en sacar todas esas ideas que hay dentro de mi cabeza, ponerlas por escrito, desarrollar algo. Porque el resto del año me la paso poniendo excusas para no hacerlo.
Es una experiencia que sin duda recomiendo hacer. Parece una locura, sobre todo cuando os he contado todo lo que ha salido mal, pero en el fondo lo disfruto, y no soy masoca. Y si el tiempo acompaña el año que viene volveré a apuntarme a ver que nueva historia se crea a lo largo de estos 30 días.

1 comentario:

  1. Te admiro mucho por participar año tras año en este reto. Espero que algun dia me dejes leer algo de lo que escribes. ¿Lo de los personajes tormentosos no sera influencia de cierta saga que nos ha durado como dos años? xD

    Saludos

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